Arthur Schopenhauer en 1815. Ludwig Sigismund Rühl. |
Schopenhauer cuenta con muchos lectores ocasionales fuera del mundo académico de la filosofía, y hasta hay clubes de seguidores acérrimos, e incluso fanáticos que se reúnen bajo su auspicio. Es un autor cuya claridad es proverbial. Para leerlo con confianza bastará con aplicarle a él mismo su célebre lema: "quien piensa bien escribe bien". Aunque así sea, nunca está de más contar con el apoyo de una guía de lectura que simplifique la tarea de comprender sus ideas.